Utilizan bacterias de 3500 millones de años para la producción de trigo sostenible

0

Con el objetivo de fomentar el uso sustentable de biofertilizantes, la firma se unió a ucrop.it para que los productores que traten sus semillas de trigo con Kanzama puedan realizar la trazabilidad de sus cultivos, mejorando la practicidad operativa. De esta manera, pueden demostrar la aplicación de prácticas sustentables desde la siembra hasta la cosecha, y acceder a beneficios tanto en productividad como en rentabilidad.

Los extremófilos son seres vivos capaces de desarrollarse en condiciones extremas donde otras formas de vida no pueden sobrevivir, por lo que promueven el crecimiento del cultivo bajo condiciones de stress y son buenos candidatos a adaptarse a condiciones no óptimas, propiedades que pueden ser trasladadas a los cultivos, detalló el portal especializado Todo Agro.

Aprovechar estas propiedades con la biofertilización tiene un doble efecto: por un lado, mayor fijación de nitrógeno; por otro lado, la solubilización del fósforo, explican los especialistas.

“La trazabilidad cumple un rol fundamental en la adopción de prácticas agrícolas sustentables y de bajo impacto ambiental, porque es la herramienta que potencia la cadena agrícola de modo que todos ganan”, indicó Marcos Botta, Co-Founder y CIO & COO (Chief Innovation and Operating Officer) de Ucrop.it, y destacó que celebran poder colaborar con Puna Bio en un desarrollo que comparte su visión de un futuro con agricultura regenerativa y sustentable.

La biotecnología aplicada a los biofertilizantes se enfoca en aprovechar los recursos autóctonos de del suelo, para promover y aumentar la utilidad en tierras fértiles o degradadas, fijando el nitrógeno y solubilizando fósforo.

“Todo lo que realizamos se basa en la naturaleza, el resultado con productos respetuosos, con un impacto positivo en el ambiente que aumenta la calidad de vida de las personas y la regeneración de la tierra. De la mano de la tecnología de ucrop.it, buscamos la trazabilidad de factores como la huella de carbono o la eficiencia en el uso de nutrientes”, mencionó Franco Martínez Levis, CEO de Puna Bio, una empresa de bioinsumos para el agro que lleva más de 20 años investigando la biodiversidad de ambientes extremos.

Al tratar las semillas de trigo con un producto elaborado a partir de este recurso natural, se potencia notablemente el rendimiento de los cultivos por hectárea, genera más cobertura vegetal y mayor número de espigas y granos por m2. (fuente Noticias AgroPecuarias)