El complejo oleaginoso del puerto de Rosario sufre el impacto de la caída en el precio internacional de los aceites derivados de cultivos.
Durante los últimos dos años los precios de los aceites vegetales de soja y colza cayeron un 27%, una tendencia que acompaña la caída de los precios de los commodities agrícolas en general, con caídas que rondan el 30% respecto del último año.
Al respecto, los economistas de la Bolsa de Comercio de Rosario, Julio Calzada y Guillermo Rossi sostuvieron que los precios de exportación de los productos que genera el complejo industrial argentino que muele soja y girasol «son elementos relevantes y estratégicos para la economía de nuestro país». «Basta con observar que en el año 2014 sólo siete productos derivados de la soja y el girasol generaron el 30% de las exportaciones argentinas», indicaron.
A este efecto, sumaron las exportaciones de harina y pellets de soja, poroto de soja y aceite de soja, biodiésel, semilla de girasol, pellets de harina de extracción de girasol y aceite de girasol en bruto. El total de ventas externas de estos siete productos alcanzaron en 2014 u$s 21.857 millones, por lo tanto, «teniendo en cuenta que las exportaciones totales nacionales en 2014 fueron de u$s 71.935 millones, este grupo de productos oleaginosos generó el 30,3% del total de las divisas obtenidas por ventas de bienes en el exterior», puntualizaron.
El análisis que realizaron los expertos de la Bolsa rosarina indica que en el último año, salvo el aceite de palma que registró una leve caída del 3%, el resto de los aceites vegetales evidenciaron bajas que oscilaron entre el 11 y el 20%. El aceite de soja -en sus distintos precios, ya sea FOB Golfo de México, FOB Brasil y FOB Argentina- perdió casi el 27% de su valor en dos años. Entre 2013 y 2014, la pérdida de valor estuvo cerca del 14%: «Estos datos son preocupantes para la Argentina y su industria oleaginosa».
«No olvidemos que nuestro país es el primer exportador mundial de aceite de soja, ya que en la campaña 2013-2014, la Argentina colocó en el exterior cerca de 4 millones de toneladas, superando a Brasil quien remitió a otros países aproximadamente 1.380.000 toneladas», advierte sobre el trabajo de los rosarinos.
Un competidor directo del aceite de soja -el aceite de colza- evidenció una baja del 27% en los últimos dos años en el precio FOB Rotterdam Ex mill mientras que el último año (2014), la baja en el precio promedio de exportación de este producto alcanzó un 16%.
En el aceite de girasol, rubro que exporta nuestro país, las bajas en los valores de exportación en los dos últimos años son significativas en ambos casos: un 22% en el FOB argentino y 29% en el FOB desde puertos de Europa; en 2014, la caída en los precios asciende al 15% y al 20% respectivamente.
Entre, las principales causas que han generado estas fuertes caídas en los precios internacionales de la semilla, harinas y aceites vegetales se encuentra «el fuerte incremento en la producción mundial de poroto de soja, traccionada por las excelentes campañas de los últimos años de los principales países productores: Estados Unidos, Argentina y Brasil».
También se suma el aumento en los últimos años en la producción mundial de aceites vegetales en general: palma, soja, colza, girasol, almendra de palma, maní, algodón, coco y oliva.
Además de un menor dinamismo del consumo doméstico mundial de aceites vegetales en los últimos años, con crecimientos por debajo de la producción y aumento en los stocks mundiales.