“Argentina no solo debe afrontar un escenario de Niña por delante, sino que arrastra la deuda de milímetros de las últimas dos campañas”, adviertió Alfredo Elorriaga, consultor de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario.
Frente a este escenario todas las miradas están puestas en la probabilidad de lluvias para el domingo. Se esperan tormentas de variada intensidad, que podrían extenderse hasta el lunes o martes.
“Se espera un trimestre hídricamente deficitario, con mejoras transitorias dentro de un contexto de lluvias ajustadas”, comentó José Luis Aiello, doctor en ciencias Atmosféricas.
“Después de un inicio generoso en setiembre, la dinámica atmosférica no logró aprovechar la alta disponibilidad de humedad”, indicaron desde la bolsa rosarina. Tampoco octubre arrancó como se esperaba. “Las persistentes masas de aire húmedo presentes sobre el centro norte del país no lograron generar precipitaciones significativas”, explicó Elorriaga.
“La situación para los cultivos es de gran complejidad: este será el segundo año de reticencia pluvial”, advirtió Aiello.
En ese sentido también se manifestó Elorriaga: “Argentina no solo debe afrontar un escenario de Niña por delante, sino que arrastra la deuda de milímetros de las últimas dos campañas”
Los especialistas advierten que este es el problema de fondo de la campaña 2021/22. Los milímetros acumulados desde principios del 2021 al 6 de octubre muestran que —en promedio— faltan 75 mm frente a las estadísticas de los últimos 30 años. El grave problema es que se suma la faltante del año pasado: la región terminó en promedio con 225 mm por debajo de la media.
Lluvias de octubre
¿Por qué las tormentas de la semana pasada no dejaron agua? ¿Es culpa de “La Niña”? Aiello evaluó que “aunque el evento está próximo a establecerse, el enfriamiento del Pacifico todavía es muy leve para afectar negativamente el régimen de lluvias de la región pampeana”. Elorriaga explicó que el problema son los mecanismos atmosféricos regionales: “no están funcionando del modo que se espera para el inicio del semestre cálido.
Entonces, ¿qué es lo que tiene que pasar para que lleguen las recargas de primavera? “Tiene que cambiar la circulación que actualmente domina en Argentina: el aire frío que ingresa por el sur de la región pampeana a intervalos regulares dificulta el ingreso de aire más húmedo que aportan las dinámicas zonales independientemente de los forzantes globales”, dice Elorriaga. Las proyecciones que brindan los modelos para la primera quincena de octubre no son alentadoras: “el comportamiento más probable es la continuidad del ambiente frío y seco con pasajes frontales que provocarán lluvias modestas similares a las que se desarrollaron en el arranque del mes”. “El último trimestre del año inicia con condiciones pluviales pobres. Los forzantes de escala regional todavía no han logrado responder activamente para que se alcancen los patrones normales de precipitación. Es probable que una mejora en el volumen de las lluvias se produzca recién hacia la última década del mes de octubre”.
Trigo en condición regular
La falta de agua y heladas agravadas por la sequía vuelven a poner en jaque al trigo de la región. Queda muy poco de las reservas de agua que dejo la lluvia a principios de septiembre. Esta semana aparecieron 50.000 ha en estado regular y en las zonas más deterioradas se estiman reducciones en el potencial de rinde. En el centro sur santafesino, “los trigos sembrados tarde usaron el agua de principios de setiembre para su crecimiento y les cuesta largar la espiga”, explican los técnicos. Y ahora se suma el temor de registros muy bajos de temperaturas, por lo que seguiría incrementándose el hectareaje en condiciones regulares, detalló la Bolsa de Rosario.
Maíz temprano
A esta altura del partido la última chance son las precipitaciones de este fin de semana. Lo que resta pasara a fechas tardías. El centro santafecino va a la cabeza de la siembra, habiendo cumplimentado con la totalidad de la superficie intencionada para fechas tempranas. La falta de humedad en el perfil trae consigo otros problemas.
Además, desde la BCR advierten que comienzan a aparecer daños por orugas cortadoras y gusanos blancos en cultivos recientemente emergidos por la deficiente incorporación de los insecticidas en la matriz del suelo. Y lo mismo sucede con los herbicidas pre-emergentes. (fuente AgroClave, diario La Capital)