Entre luces y sombras del mercado, el sorgo viene bien. “En los últimos años viene aumentando el área sembrada: llegamos casi a 988.000 hectáreas. Si bien no estamos en el récord de la década del 80 cuando teníamos 8 millones de toneladas de producción, la cosa va para arriba”, auspició Julio Calzada, director de Informaciones y Estudios económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario, en el marco de una charla sobre las perspectivas de la futura cosecha gruesa brindada en el recinto de Paraguay 755.
“En esta campaña estaremos en 2,8 millones de toneladas de producción, de los cuales uno y medio va para exportación y el resto queda acá para forraje animal. Lo bueno que tiene el sorgo hoy, es que hay tres exportadores a nivel mundial: Estados Unidos, Australia y nosotros. Entre los tres tenemos entre el 90% y el 95% del mercado. Punto negativo: el gran comprador de este mercado es China, que se lleva 10 millones y medio de toneladas sobre un total de 12. Si le pasa algo, se resfría, estamos en problemas”, señaló.
Calzada comentó que China produce un aguardiente, un licor muy costoso llamado Baijiu, que se elabora con sorgo y con arroz, pero que también tiene la posibilidad de armarse de otra manera. “Es la gran bebida china porque se consume tres veces más que la cerveza y prácticamente quince veces más que el vino. Son 10.000 millones de euros. China lo hace concretamente con su propia producción, que son tres millones de toneladas y con algo de granos que importa. El problema que tiene Argentina es que le vende sorgo para forraje. No tenemos la autorización para vender sólo industrial, para poder hacer concretamente este aguardiente”.
En ese sentido, aseguró que “debemos que trabajar el sorgo como una especialidad, mejorar las normas de calidad, ponerle el peso hectolítrico, y tratar de convencer a China que sea un poquito más flexible, porque el sorgo para uso industrial no tiene que tener ningún cuerpo extraño, ni sorgo de alepo, etc. Eso es una agenda que lógicamente tienen que ver las cámaras arbitrales y lo tienen que abordar”.
Lo bueno es que “el precio internacional viene para arriba, esto tira los precios locales también del sorgo y del maíz”.
“El cultivo es bueno para la rotación, se la banca ante la falta de agua mucho mejor que la soja y el maíz, el problema está en la cuestión del pulgón, que es una de las plagas que aqueja el cultivo”, señaló.
Y advirtió que “nosotros usamos sorgo con tanino, que nos viene bien para las palomas y los pájaros”.
En cambio , en Australia y Estados Unidos usan un sorgo sin tanino. “Hay especies híbridas acá en venta, pero los productores prefieren el otro”, describió.
Calzada recordó que la geopolítica es un tema clave. “Cuando uno empieza a indagar y rascar qué es lo que está pasando en el Indopacífico, en la zona donde está China y Australia, ve que hay enormes tensiones por las inversiones que hace China en todos los países que están pegados a Australia y en todas las islitas”, señaló.
Concretamente, “en Nueva Guinea hay una inversión en un centro de pesca de 200 millones de dólares que le presta China, que está a 200 kilómetros de la costa de Australia. El temor que tienen los australianos aliados a Estados Unidos es que China pueda tomar el control de las aguas. Y si hubiera algún problema con Taiwán, Estados Unidos va a responder, y Australia lo tiene que apoyar.
Todas estas luchas de China con Estados Unidos y con Australia pueden favorecer Argentina, porque geopolíticamente nosotros no estamos en el conflicto y nos pueden llegar a comprar a nosotros”, remató el jefe de los investigadores de la Bolsa. (fuente AgroClave, diario La Capital)