La siembra de maíz de primera en el centro y norte de Santa Fe avanzó esta semana a buen ritmo, pese a un par de días de inestabilidad climática, y las estimaciones se mantienen en cubrir una superficie superior a las 200.000 hectáreas, superando en al menos 10 puntos la de la campaña anterior.
De acuerdo con el informe semanal que confeccionan el Ministerio de la Producción provincial y la Bolsa de Comercio de Santa Fe, difundido este jueves, «la intención de siembra total sería superior en un 10 a un 11% al área sembrada en la campaña anterior, que fue de 184.500 hectáreas».
El productor contaba con los materiales e insumos, reservados o comprados, por lo que sólo la variable climática fue reguladora del inicio del proceso, que adquirió un mayor ritmo que en la semana anterior.
Lo implantado en primera instancia logró muy buena germinación, emergencia y stand de plantas, y hasta la fecha no ha presentado inconvenientes.
En lo que respecta al trigo, se estima probable llegar a una producción mayor o por lo menos similar a la de la campaña pasada, que fue de 1.134.380 toneladas.
Del total de la superficie sembrada, un 92% del cultivo se encontró en estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes; un 5% en estado bueno a levemente regular, y un 3% en estado regular.
Los cultivares se han visto favorecidos por las condiciones ambientales, con bajas temperaturas, heladas en etapas fenológicas óptimas, precipitaciones de montos variables y de bajas intensidades.
En lo referente al aspecto de sanidad, se han efectuado tratamientos con fungicidas oportunos, como consecuencia de los continuos monitoreos y seguimientos.
Esta semana concluyó el proceso de siembra del girasol, favorecido por las condiciones ambientales y la estabilidad climática, y la superficie cubierta llegó a alrededor de 100.000 hectáreas.
Hasta ahora se ha observado una muy buena germinación y emergencia de lo implantado, con buen comienzo del desarrollo de las plantas en sus distintos estados fenológicos.