China se transformó –en tiempo récord– en el primer comprador de carne bovina argentina (si se considera el volumen físico). Hasta el año pasado ese podio era ocupado por Chile y la Federación Rusa.
Las exportaciones argentinas de cortes frescos bovinos en los primeros siete meses de 2015 fueron de 85.732 toneladas, de las cuales un 32.0% se destinaron al mercado chino, según datos oficiales del Senasa. Se trata de una cifra 192% superior a la registrada en el mismo período de 2014.
El potencial del mercado chino para la industria cárnica argentina es mucho mayor al presente porque actualmente sólo está habilitado el ingreso de cortes bovinos congelados (autoridades sanitarias argentinas están negociando con pares chinos –por el momento sin éxito– la apertura para cortes enfriados de mayor valor).
El surgimiento de la demanda china llegó en el momento justo porque la Federación Rusa –un gran comprador tradicional de cortes vacunos congelados de valor bajo/medio– redujo considerablemente las importaciones de carne luego de la súper devaluación del rublo.
Los principales cortes congelados comprados por China en enero-julio de este año fueron brazuelo con 3721 toneladas, seguido por paleta (2845), garrón (2820), aguja (2798), bola de lomo (1579) y nalga de adentro (1481).
En los siguientes lugares del ranking importador se ubican Chile con compras en enero-julio de este año por 14.151 toneladas (-10% que en el mismo período de 2014), seguido por Israel con 10.094 toneladas (+26%), Rusia con 9222 toneladas (-35%) y Alemania con 2470 toneladas (-14%).
China también es el primer comprador –tanto en volumen como en divisas– de carne bovina uruguaya. Entre enero y el 15 de agosto de este año, según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Carnes (Inac), se colocaron 70.731 toneladas de cortes congelados (43.9% del total) en la nación asiática a un FOB promedio de 4169 u$s/tonelada.