El Gobierno argentino lanzó el viernes una nueva edición del dólar soja y estará vigente desde este lunes 28 de noviembre hasta el 31 de diciembre, con un valor de $230, tras actualizarse de acuerdo a la inflación.
El acuerdo con las cerealeras ya tiene un piso garantizado y firmado de 3.000 millones de dólares en exportaciones, segun fuentes del mercado granario.
El programa cuenta con tres objetivos por mayor recaudación, que incluyen el financiamiento de promoción para economías regionales, subsidios a las cadenas de valor avícola, bovina, lechera y porcina para aumentar producción y un fondo para mantener valor de las asignaciones familiares.
También prevé un premio a la industrialización de soja para aumentar la incidencia de aceites y harinas en las exportaciones del complejo agroindustrial.
“Lo hacemos con la convicción de que tenemos que lograr, al 30 de diciembre, batir el récord de exportaciones argentinas en lo que es el complejo agroindustrial, entendiendo que Argentina es parte de la agenda de la seguridad alimentaria, al igual que el debate y la pelea por las proteínas a nivel global es una de las grandes peleas”, explicó el ministro.
También agregó que la implementación del programa de promoción de exportaciones para el complejo agroindustrial tiene por función fortalecer las reservas. “Permite generar mayor nivel de actividad en el sector agropecuario y agroindustrial, y además la mayor recaudación que le genera esto al Estado tiene que ser aprovechada de manera virtuosa para tratar de atender las asimetrías o las dificultades que pueda generar el programa en el mercado interno”, continuó Massa, ante sus interlocutores.
Según el ministro de Economía, el objetivo del programa es que los recursos que se acumulen gracias al dólar soja hasta fin de año sirvan durante el mes de enero, febrero y marzo “para encarar un programa de reducción de retenciones en las economías regionales a los efectos de hacerlas más competitivas en términos de exportaciones”.
Exportadores
El presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y de la Cámara de Exportadores, Gustavo Idígoras definió que el dolar soja II como “nueva condición como una mejora que, aunque sea temporal, tendrá un impacto directo en el precio de la soja en el mercado interno”.
Idígoras resaltó “que la decisión de venta de soja está siempre en manos del productor, y será él quien decida cuándo vender, entendiendo que en esta oportunidad el tipo de cambio va a durar únicamente hasta fin de diciembre”.
En cuanto a los posibles impactos, dijo que “el flujo estimado de ingreso de divisas para todo el complejo cerealero – oleaginoso durante el mes de diciembre estaría en 3 mil millones de dólares”.
Asimismo, explicó que hasta tanto no se logre la eliminación de los derechos de exportación, las alícuotas deben lograr la igualdad tributaria, es decir, un exportador de soja y un exportador de productos industriales de la soja deben pagar los mismos impuestos por la tonelada de soja comprada.
Finalmente, el presidente de Ciara-CEC afirmó que “esta medida temporal deja en evidencia la necesidad de trabajar en una política pública que aligere en forma permanente la alta carga tributaria que pesa sobre la cadena de soja. Los cambios circunstanciales en el tipo de cambio no son bases firmes para lograr el crecimiento y el desarrollo del sector. Por eso propiciamos un único tipo de cambio como política permanente”. (fuente Noticias AgroPecuarias)