La firma de sembradoras santafesina Crucianelli, radicada en Armstrong afianza su proceso de internacionalización. Ayer selló un joint venture con el grupo brasileño Piccin _compañía de maquinaria agrícola con más de 60 años de trayectoria_ para fabricar equipos destinados al mercado brasileño, con tecnología argentina. Será en una nueva planta de ambas empresas en la localidad de Sao Carlos (Estado de Sao Paulo).
Hace diez años, Crucianelli salió a la búsqueda de un partner que compartiera su modelo de gestión y sus valores empresariales. Finalmente encontró en Piccin su contraparte. Tras un año de negociaciones se firmó el acuerdo de asociación en el marco de Agroactiva, la mega muestra a campo que se realiza desde el miércoles y hasta el sábado en la intersección de la Autopista Rosario – Córdoba y ruta nacional 178.
“Este es un paso fundamental que queríamos dar y va en el camino que nos propusimos de jugar en las primeras ligas a nivel mundial, haciéndolo en Brasil que es el segundo mercado agrícola del mundo”, resumió el CEO de la firma santafesina, Gustavo Crucianelli, quien firmó el acuerdo junto a Camilo Ramos, CEO del Grupo Piccin. En el acto estuvo el gobernador Omar Perotti.
Esta “sinergia”, que destacó Crucianelli también es compartida por los directivos de Piccin. “El negocio agrícola en Brasil nunca será igual después de este acuerdo”, afirmó Ramos quien destacó el compromiso de “llevar la mejor tecnología argentina para abastecer al mercado brasileño”.
Este primer año, la nueva planta que se pondrá en marcha el mes próximo, comenzará con la fabricación de diez máquinas, en una etapa de prototipo y adaptación del producto nacional al mercado brasileño. “Nos basamos en la tecnología y en realizar productos diferenciales”, detalló Crucianelli para dar cuenta de la estrategia de inserción que se enfocará, en una primera etapa, en el mercado del centro y centro oeste de Brasil, ya que en el sur las máquinas utilizadas son distintas.
En la nueva planta, Crucianelli fabricará el producto base, que es la sembradora, pero montada como mínimo en un 60% con piezas de origen brasileño en su mayoría porque la legislación de del vecino país exige eso para nacionalizar los equipos. También es un requisito esencial para poder acceder a los créditos que otorga el sistema financiero de Brasil. “El desarrollo de toda la red de proveedores va a ser lo que vamos a encarar rápidamente pero nos va a llevar más tiempo”, indicó el CEO de Crucianelli quien además confirmó que las máquinas llevarán esa marca comercial.
El arribo de Crucianelli a Brasil corona un proceso de larga data. La firma decidió internacionalizar su producción y comenzó hace 27 años a testear la posibilidad de acceder al mercado brasileño. Luego de algunas decepciones, retomó con más ímpetu la iniciativa entre los años 2006 y 2008, con la intención de fabricar máquinas más grandes para la región norte de Brasil.
“Buscábamos el mismo ADN de Crucianelli y lo encontramos en Piccin, que comulga con nuestros mismos valores, nuestro modelo de gestión y es una empresa familiar altamente tecnologizada”, recordó Crucianelli.
El grupo Piccin lleva más de seis décadas operando en Brasil. “Siempre damos pasos en favor del negocio agrícola y las start up tecnológicas”, dijo Ramos y reconoció en Crucianelli una empresa “con productos innovadores”.
Actualmente la compañía de Armstrong sigue avanzando firme con su proceso de inversión para llegar a la meta que se trazó de posicionarse en 2030 como la quinta a nivel mundial en el segmento de sembradoras. “Seguimos haciendo lo posible para no frenar la inversión pese a la caída del mercado por la sequía”, dijo su CEO. En ese sentido, siguen trabajando en el proyecto de una obra de 3.000 metros cuadrados para desarrollo de tecnología (I+D).
Como al resto del sector, la sequía los golpeó. Están trabajando al 60% de la capacidad instalada, pero, pese a eso, en la planta se mantiene el personal y la misma cantidad de turnos de trabajo. “Vamos a seguir trabajando para pasar esta situación y estar firmes para cuando vuelva la revancha”, indicó. (fuente AgroClave)