En el noroeste de la provincia de Buenos Aires y sur de Santa Fe, las condiciones ambientales vienen siendo esquivas para el desarrollo de los cultivos invernales, sobre todo por la notoria falta de precipitaciones.
Un claro ejemplo de esta ausencia de lluvias en esa región agrícola núcleo, es que en el Partido de Pergamino, en el norte bonaerense, la última lluvia se presentó el 25 de mayo pasado, por lo que ya transcurrieron tres meses sin precipitaciones.
Asimismo, en esa región hubo una alta ocurrencia de heladas, y numerosos días nublados con muy baja temperatura.
Para el próximo viernes 24 de agosto, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anuncia para toda la región más de 20 mm de lluvias que vendrían muy bien para todos los cultivos invernales.
Pero ante las condiciones climáticas que se vinieron dando hasta el momento, para conocer la situación actual de los cultivos de trigo y arveja y sus expectativas de rendimiento en esta región, El ABC Rural consultó al ingeniero agrónomo Andrés Llovet, especialista del INTA Pergamino.
Adecuada humedad de implantación, y luego sin lluvias
“El comienzo de la campaña de implantación del cultivo de trigo fue bueno, ya que a fines de mayo tuvimos en toda la región una lluvia generalizada de entre 15 y 45 mm, que permitió cumplir inicialmente con los cultivos planificados”, recordó Llovet.
“Pero las condiciones ambientales para el desarrollo de los cultivos invernales no vienen siendo las ideales, básicamente por las muy bajas precipitaciones y el alto número de heladas agronómicas”, lamentó.
En ese sentido, el especialista informó que luego de esa buena implantación de los cultivos invernales, las precipitaciones no volvieron a ocurrir.
“Esto provocó que muchos trigos de ciclos intermedios y cortos se sembraran con escasa humedad superficial, e incluso se registraron algunos lotes que directamente no se pudieron sembrar, al igual que otros destinados a arveja”, destacó.
Asimismo, el entrevistado, indicó que “si bien hacia fines de julio hubo algunas precipitaciones erráticas que subsanaron en parte estos problemas, no fue de manera generalizada, sino muy puntual”.
Buenas expectativas de rinde a la espera de humedad
-¿Cuál es la expectativa de rendimiento de trigo ante estas condiciones?
-En principio se siguen manteniendo. Son entre buenas y aceptables, sobre todo en aquellos lotes que se implantaron correctamente. Además, la mayoría del trigo se encuentra en etapa de macollaje, la cual no tiene demasiados requerimientos hídricos.
Pero al comenzar la etapa de primer nudo y encañazón, la evapotranspiración aumenta significativamente, siendo el estadio fenológico a partir del cual ya comienza a afectarse el rendimiento en trigo. Por eso en el corto plazo se necesitan lluvias significativas, y también para poder terminar de incorporar los fertilizantes nitrogenados en el perfil del suelo.
-¿Qué pasaría con el cultivo de arveja?
-Para aquellos lotes que comenzaron en fecha correctamente, las expectativas de rendimiento también siguen siendo buenas. Además hay que tener en cuenta que los requerimientos hídricos para generar buenos rendimientos en arveja son mucho menores al de trigo, más allá que hubo que hacer algunos controles puntuales sobre pulgón (plaga muy asociada a sequía). (fuente El ABC Rural)