Ante un contexto de sequía que afectó principalmente a los cultivos de la campaña fina, postergó el inicio de la siembra de la gruesa y le pegó duro también a la ganadería, los productores de una amplia zona de la región agrícola recibieron este 1° de enero la novedad más esperada: las lluvias se hicieron presentes en varios puntos del país y dejaron buenos registros de humedad.
De acuerdo a diversas fuentes, como el Centro de Investigación de Recursos Naturales del INTA y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), los mayores acumulados se concentraron en el centro del país: sur de Córdoba, San Luis, La Pampa, y noroeste y sur de Buenos Aires.
El panorama se completó con el correr del fin de semana en más puntos agrícolas. Para Santa Fe, en Venado Tuerto alcanzaron una medición de 17 mm, pero Firmat y Teodelina llegaron a los 30 mm. Hubo picos como en la zona de Berabevú, cerca del límite con Córdoba, donde los registros marcaron lluvias de hasta 33 milímetros. Rafaela, en otro puntos distante de la provincia, recibió 8,5 mm.
En el sudeste de Buenos Aires la lluvia también finalmente se hizo presente. Con picos de 28 mm para la localidad de Ramos Otero, Lobería o General Madariaga (25 mm) los productores obtuvieron algo del agua, que les faltó para gran parte de lo que fue la castigada temporada del trigo. Vidal y General Pirán obtuvieron 18 mm.
La zona núcleo con poca agua
En cambio, desde Rosario no ocultaron su desencanto porque el aporte hídrico en la zona núcleo que rodea a los puertos fue escaso.
Según datos de la Bolsa de Comercio de esa ciudad, los pluviómetros indicaron registros de apenas 5 mm y 9 mm para la ciudad de Junín, en el norte bonaerense. Solo Pergamino obtuvo un valor mejor, de 18 mm.
En el Centro de Investigación de Recursos Naturales del INTA indicaron que Paraná, en Entre Ríos, registró 2 mm. Se trata de una medición que no modifica el panorama que sufren los productores desde hace largos meses de sequía. (fuente Infocampo)