Confirmando lo que Sergio Massa anticipara desde Estados Unidos la semana última, el Ministerio de Economía lanzará este miércoles por la tarde el “dólar agro”, un plan de incremento exportador para apuntalar el nivel de reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
Según informó Infobae, “el equipo económico está ajustando los detalles con los diferentes sectores del agro. La presentación del ´programa de incremento exportador´es este miércoles”, señaló este domingo por la noche una fuente de la Secretaría de Agricultura.
Si bien por estas horas los funcionarios de Economía ultiman los alcances de la medida, ya se adelantó que la misma contemplará la tercera edición del dólar soja y también un tipo de cambio diferencial para las economías regionales.
¿45 días para la soja?
El tipo de cambio diferencial del complejo sojero sería por 45 días. Trascendió que los exportadores mantuvieron charlas con los funcionarios de Agricultura para corregir imperfecciones en la implementación del nuevo tipo de cambio para el sector.
En ese sentido, advirtieron que habría problemas si rigiera solo en abril. Gana espacio la idea de que la variante para la oleaginosa entre en vigencia a mediados de abril y sea efectivo hasta fin de mayo, de modo de abarcar la mayor mayor producción/exportación posible.
Además, hasta el momento se desconoce el valor que tendrá, pero un informe del Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano señaló que debería estar en torno de los $300, dependiendo el valor exacto de la fecha en que se inicie.
Para las economías regionales regiría por 90 días
Por el lado de las economías regionales, el plazo de duración del beneficio cambiario será de 90 días ya partir de mayo. Desde el Gobierno apuntan al ingreso de la mayor cantidad de producciones a dicho beneficio, en función de los tiempos de cosecha y comercialización de cada una.
Algunos especialistas señalaron que un tipo de cambio diferencial podría ser aprovechado solo por empresas concentradas y con stock disponible para exportar durante el período de vigencia de la medida.
Son producciones que se comercializan en diferentes momentos del año. Por caso, la temporada de peras y manzanas en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén se inicia en la primera quincena de enero y la vendimia de uvas arranca recién en febrero. Y así con otras economías extrapampeanas que debería abarcar el “dólar agro”.
Sequía
Desde la Secretaría de Agricultura comentaron a Infobae que tienen en claro que los efectos de “La Niña”, fenómeno climático de lluvias por debajo de lo normal, no terminaron con la declaración del fin de esa etapa climática. Por eso consideran que se debía avanzar con las medidas que el último jueves anunció el ministro desde EEUU.
“Hay que contener a pequeños y medianos productores, que siempre arriesgan, invierten y generan fuentes de trabajo en cada una de las economías regionales”, dijeron desde el entorno de Juan José Bahillo, titular del área, y ratificaron que las medidas apuntan no solo a aumentar la recaudación, sino también a generar recursos financieros para mejorar la siembra de la campaña 2023/24.
Una parte de los fondos que ingresen por el dólar agro se destinará a ampliar la ayuda a los productores damnificados por la sequía e y a instrumentar financiamiento para la próxima campaña de granos, que demandaría una inversión superior a los USD 15.000 millones. En despachos oficiales aseguran que las condiciones climáticas “van a ser muy buenas para las próximas campañas; hay que generar herramientas de financiación para que los productores puedan invertir y aumentar la superficie de siembra”. (Infobae)