La facturación proyectada de la cadena triguera argentina en el ciclo 2016/17 es de 3823 millones de dólares.
En apenas un año el valor agregado de la cadena triguera se duplicó gracias a la eliminación de los derechos de exportación y los ROEs (cuotificación discrecional de los saldos exportables del cereal) instrumentada por el gobierno macrista.
La facturación proyectada de la cadena triguera argentina en el ciclo 2016/17 es de 3823 millones de dólares, una cifra 56% superior a la registrada en 2015/16, según un estudio realizado por técnicos del Instituto de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires para Argentrigo.
El Producto Bruto Triguero (PBT) en 2016/17 es estimado en 2707 millones de dólares versus 1356 millones en 2015/16. Es decir: se duplicó en apenas un año (el PB constituye el valor económico adicional que adquieren los bienes y servicios al ser transformados durante un proceso productivo).
Un estimado del 29% del PBT corresponde a propietarios de la tierra y empresarios agrícolas, mientras que 22% constituye el aporte industrial, 20% impuestos (Estado), 10% contratistas y servicios, 9% transporte (fletes) y 6% insumos, entre otros eslabones.
“Cuando se habla de la cadena triguera se hace referencia al sector primario porque es la categoría que se emplea en economía para encuadrar a esa actividad, pero la producción primaria es sólo una parte de la cadena de valor triguera, que incluye un entramado complejo de industrias y servicios”, explicó hoy Ramiro Costa, director del Instituto de Estudios Económicos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, al presentar el estudio durante un evento organizado en la sede porteña de esa entidad.
EL PBT contempla los factores económicos necesarios para producir el cereal (tierra, fitosanitarios, fertilizantes, semillas, contratistas rurales y servicios agronómicos y comerciales), acopio, molienda y exportación. Pero no considera el comercio minorista local de productos panificados por el déficit de datos existente al respecto.
“Una mayor producción de trigo contribuye a reducir la capacidad ociosa de industrias, camiones y terminales portuarias, permitiendo incrementar las eficiencias de los diferente eslabones de la cadena de valor”, apuntó Costa.
Por Valor Soja