“Se ha instalado un clima extremo; el clima ya no se mueve en valores medios, se mueve entre valores extremos. En los últimos 15 a 17 años se está analizando una tendencia a menores precipitaciones y escasez de agua durante el invierno y el inicio de la primavera. Se podría estar ampliando la estación seca”.
La sentencia pertenece a Pablo Mercuri, director del Centro de Investigación de Recursos Naturales (CIRN) del INTA, y deja a las claras los riesgos a los que está sometido el campo argentino en el marco del cambio climático.
Y un ejemplo concreto es el corazón triguero del sur de Buenos Aires: según datos relevados por un experto del INTA Balcarce, el promedio de lluvias de la campaña actual es el más bajo en al menos 22 años.
SEQUÍA PROLONGADA
El especialista Pablo Abbate tomó los registros de las precipitaciones ocurridas desde mayo en cinco estaciones meteorológicas del sudeste bonaerense: Balcarce, Mar del Plata, Miramar, La Dulce y Tandil, y los comparó con los valores obtenidos para ese período desde el año 2000 hasta la actualidad.
“Se encontró que a partir de mayo la precipitación fue sustancialmente menor al promedio histórico y que tal situación no cambió al avanzar el año, en ninguna de las estaciones consideradas”, sintetizó Abbate.
Y añadió: “Los datos muestran que la presente sequía es la más prolongada desde el año 2000 al presente. En consecuencia, la escasez de lluvias de la presente campaña es la más intensa y más prolongadas que se haya dado en la zona en al menos los últimos 20 años”.
UN ALIVIO, ¿Y OTRO MÁS?
En este marco, las lluvias ocurridas durante el último fin de semana “pudieron impedir que la situación se agrave, pero no pueden revertir la pérdida de rendimiento que ya presentan los cultivos de trigo y cebada de manera irreversible”, profundizó Abbate.
Una esperanza de que esta situación no se acentúe, es el pronóstico para los próximos días del Instituto de Clima y Agua del INTA.
Según Pablo Mércuri, se esperan lluvias que sucederían principalmente en zonas como Azul, Tres Arroyos, Coronel Suarez, Tandil, Balcarce, Mar del Plata, Necochea y Lobería.
“Este nuevo evento beneficiaría a los trigos que se encuentran en situación regular a buena, ya que pueden retomar encañazón”, precisó.
Los modelos indican que serían descargas por encima de los 20 milímetros y es una buena expectativa para la zona triguera.
De acuerdo con Mercuri, “esos trigos podrían detener la proyección de caída de los rendimientos, aunque no va a hacer que se vuelva a subir porque fue muy marcada la sequía y las heladas en el sur de la provincia”, aclaró. (fuente Infocampo)