En Carlos Tejedor, en el oeste de la provincia de Buenos Aires, entramos en un período crítico por la reducción de las lluvias. Los cultivos de trigo y cebada están denotando la falta de precipitaciones. En superficie la humedad es escasa a nula.
Además, a pesar de estar en una zona donde las lluvias anuales están igual o por encima del histórico, estamos a una semana de la siembra de maíz de primera.
Los primeros días de septiembre ocurrieron heladas en la zona y eso se nota en algunos lotes con cultivos que sufrieron las consecuencias. Sumado a la falta de humedad, el trigo y la cebada están necesitando urgentes lluvias para no perder potencial de rendimiento, que hasta el momento están en muy buena performance. Hasta aquí se defendieron muy bien debido a las precipitaciones antes mencionadas.
Por presencia de napa, barbechos largos y alta cobertura en los lotes, los productores podrán realizar siembra de maíces tempranos, pero otros tendrán que esperar alguna lluvia, ya que los primeros centímetros del suelo están sin humedad y sería un riesgo sembrar y que no llueva a corto plazo.
Por eso la zona está a la espera de una lluvia para mantener alto potencial de los lotes sembrados con cultivos fina y para que la campaña 19/20 empiece de la mejor manera y con las esperanzas renovadas como siempre.