Este fin de semana, seis silobolsas que contenían 1300 toneladas de maíz aparecieron cortados en un establecimiento rural ubicado a 4 kilómetros de la vecina localidad de María Teresa.
El hecho afectó a una empresa agrícola familiar que tiene menos de 200 hectáreas propias y alquilando suma un total de 1200 hectáreas.
Los tres hermanos que integran la firma, de apellido Ansaloni, trabajan ellos mismos en los campos. «No somos productores desde una oficina, nos hicimos muy de abajo», dijo Leandro al diario La Nación y apuntó que el cereal se mojó porque durante la noche del sábado se registró una lluvia de 30 milímetros.
«Era toda la cosecha de ese campo. Lo que se afectó son 1300 toneladas. Cubrimos como con una sábana con silobolsas al cereal porque llovió», indicó.
Ansaloni no tiene una dimensión de la pérdida económica que esto pueda ocasionar, ya que en unos días, cuando mejore el tiempo y se pueda acceder al campo, podrá hacer la consiguiente recolección. «A lo mejor perdemos 1000 toneladas, 100 o nada, no lo sé», dijo.
El productor señaló que hizo la correspondiente denuncia policial, pero aclaró que no tiene sospechas sobre los posibles autores.
«En los próximos días, cuando salga el sol y se acomoden los caminos, vamos a empezar a cargar y llevar a un acopio de Santa Isabel (hace unas semanas Ansaloni hizo una donación de alimentos a este último pueblo). Seguro alguna pérdida vamos a tener», acotó el productor.