Expocereales visibilizó las oportunidades cercanas y posibles del trigo y la cebada

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Las dos hectáreas de lotes sembrados en prolijas parcelas que albergaban más de 60 ensayos diferentes de Expocereales retrataron que, tanto el trigo como la cebada necesitan una profunda actualización productiva.

En genética sorprendieron las nuevas variedades que presentaron las empresas RAGT Semillas y Buck que apuntaron a dejar de lado la dicotomía calidad o rindes. En otras de las parcelas los biológicos ganaron por goleada y reafirmaron que llegaron para ser protagonistas. Desde trigos altos y fuertes tratados con la bacterias que captan nitrógeno del aire de la firma Corteva, pasando por la combinación de químicos y biológicos que se animó a presentar una empresa líder como Syngenta, hasta variedades tratadas con polifenoles de la empresa italiana Agrocube. También se vieron cepas de hongos a base de trichoderma de empresas como Indigo, Insuagro y Biotrop, otras a base de extractos de levadura de la mano de ALZ, el conocido y eficaz tratamiento de semillas Innobio biológico de la empresa Helm y hasta los nuevos fertilizantes que reducen la huella de carbono de la empresa Yara. Además se presentaron lotes de las empresas Surcos, Basf, Gowan que apuntaron al control de malezas, erradicar la fitotoxicidad y  mejorar las mezclas.

También hubo espacio para las aplicaciones con drones y aplicaciones selectivas de la mano de empresas como H2O que dejaron un mensaje muy claro: “se puede controlar adversidades usando mucho menos producto gracias a las nuevas tecnologías”. También la Ing. Laura Soria de Barenbrug se refirió a la acción de los tratamientos de semillas biológicos y la empresa Agrospray dejó en claro que los auxiliares de aplicación ocupan también un lugar central en esta discusión.

Las voces que suman pero que incomodan:

A la hora de hablar del mercado se destacó la presentación de los Directivos de Molinos Matilde llegados desde Santa Fe: René Mangiaterra y Juan Imhoff quienes explicaron el camino que los llevó a ser el único molino argentino que hoy exporta trigo segregado por calidades a Brasil, su crecimiento y desarrollo hasta el punto que hoy ya tienen un segundo molino en tierras brasileñas y crecen exportando con plus de precio. Entre su relato Mangiaterra contó experiencias sobre cómo la exportación argentina ha perdido credibilidad y prestigio por no tener una constancia en la calidad de los embarques y exportar hoy un trigo muy mezclado. “Hace un tiempo nos reunimos con compradores de Perú y se negaban a comprarnos por ser argentinos, contaron que en el segundo embarque que recibieron de un exportador había hasta una bota usada entre el trigo”. “La clave de llegar a mejore precios y mejores negocios es ser intachables a nivel confianza” sostuvo.

En ese sentido se expresó también el Ing Agr. Martin Biscaisaque Presidente de Argentrigo quien sostuvo que la producción argentina y la comercialización sobre todo deben ser renovadas. “Hace falta más investigación y desarrollo sobre todo en trigos funcionales de alta fibra y bajo gluten, mayor desarrollo en infraestructura y transporte, mejorar los puertos para garantizar el arribo de los embarques en tiempo y forma, resetear las redes comerciales para dar cumplimenta a las certificaciones y normativas que fijan los estándares comerciales más exigentes en seguridad alimentaria, mejorar los estándares de producción hasta lograr trigos con mayor calidad producido con tecnologías que reducen el impacto ambiental  y sobre todo mejorar radicalmente la consistencia exportadora”.

A su turno Alejandro Berlingieri de la Cámara Cervecera sostuvo que el consumo de cerveza en Argentina se encuentra estancado con un promedio de 45, 5 litros per cápita anual desde el 2011. Además explicó que el consumo comienza a orientarse hacia nuevas presentaciones de sabores lo cual amerita un manejo diferente de las variedades de cebada, malta y lúpulo y del manejo de esos cultivos.

También el Dr. Jorge González Montaner de CREA Mar y Sierras coincidió en que hace falta incorporar tecnologías biológicas, bioestimulantes y otras formas de producir que aseguren mayor sustentabilidad y presentó números contundentes sobre la relación costo respuesta de los anti estresantes en trigo. Finalmente el Ing. Agustín Bilbao presentó “Malambo” un estudio sobre la relación manejo de malezas ambiente y bolsillo donde quedó en claro que las aplicaciones de herbicidas y los barbechos que se hacían hace 5 o 6 años atrás, deben ser renovados con otra mirada productiva.

Sobre el cierre se realizó una nueva recorrida por las instalaciones para estudiantes de la Facultad de agronomía de Mar del Plata con el apoyo del CIAFBA dela Municipalidad de Miramar y del Ministerio de Desarrollo Agrario de la Provincia de Buenos Aires

Expocereales cerró sus puertas pero los cultivos en La Ballenera aún pueden ser visitados, algo que está ocurriendo por estos días después de tanto sano replanteo.