Altas temperaturas y pocas precipitaciones fueron la constante de la primera quincena de enero. Los pronósticos son más alentadores para la segunda quincena con temperaturas más bajas pero poca lluvia prevista. Las plagas no han complicado este panorama. No hay alertas generales para toda la región central del país con excepción de arañuela roja en soja, que aprovechando la alimentación que brindan las plantas con estrés aumenta sus poblaciones rápidamente. Las orugas defoliadoras empiezan a despertarse y se esperan los primeros ataques generalizados hacia fin de mes.
En la zona agrícola Núcleo Sur (Sur de Córdoba, Norte de La Pampa y Oeste de Buenos Aires) fue la menos perjudicada por las condiciones ambientales de los últimos 15 días. Salvo áreas puntuales como las de Vedia donde el estrés hídrico y térmico está condicionando el futuro de los cultivos, el grueso de la región presenta buenos niveles de tolerancia a estas condiciones con cultivos que recibieron buena cantidad de agua y los pronósticos, aunque no tan optimistas en cuanto a precipitaciones, son más alentadores que en el resto del país. Y las plagas vienen ayudando, ya que, a diferencia de otros eneros, la presión es en general relativamente baja. Así la oruga bolillera mantiene su presencia en toda la región sin alcanzar niveles de alarma. Muy heterogénea su ocurrencia, más elevada en General Villegas, San Basilio y General Pico, pero afectando más las zonas donde los cultivos sufren más estrés como mencionara en Vedia. Pero en algunas trampas de luz como la de La Carlota también mantiene niveles moderados a alto, lo que está llevando a efectuar algunos tratamientos. En cuanto a defoliadoras, a pesar de las bajas capturas registradas en trampas de luz en la región, en campo hay ataques moderados tanto en soja como en girasol. En este cultivo se agrega la presencia de la gata peluda norteamericana Spilosoma virginica causando daños que merecen intervenciones. Completa el panorama de plagas el incremento de rodales de arañuela roja en soja, y aún en maíz, que colonizan las zonas más estresadas de los cultivos. En maíz, la cogollera mantiene las capturas en la región con niveles moderados, salvo en General Villegas donde aumentó considerablemente. En campo no hay alertas inmediatas pero con altas temperaturas esta plaga completa el ciclo muy rápidamente. Panorama relativamente tranquilo se prevé para la ocurrencia de plagas en la última quincena de enero, pero cada lote es cada lote y solo el monitoreo provee la información necesaria para una buena toma de decisiones. (fuente Agrositio)