En los primeros cinco meses de 2020 el sector avícola presentó un panorama de crecimiento, por la expansión tanto del consumo interno como de las exportaciones. Así lo señaló el último informe de IES Consultores. Su director, Alejandro Ovando, estimó que para el resto del año se espera que el sector avícola “continúe creciendo a buen ritmo”.
El analista explicó que la favorable relación de precios con respecto a las carnes sustitutas, sumado al confinamiento obligatorio en un contexto de merma de ingresos y empleo, impulsaron la demanda doméstica de carne aviar, al tener un rendimiento superior en la mesa familiar.
Por otro lado, las exportaciones se vieron impulsadas principalmente por China, Chile y Sudáfrica, con importantes incrementos en las compras a la Argentina. “La rentabilidad del productor se vio algo ajustada en los últimos meses, debido al desfase entre el avance de los costos y el menor incremento en el precio de la carne aviar, tanto en el segmento minorista como mayorista”, señaló el informe. Sin embargo, aclaró que se espera que hacia adelante la producción continúe con el sendero de crecimiento actual, “con la posibilidad de algún ajuste en el precio tanto al consumidor como al productor para poder mantener los niveles de rentabilidad en terreno positivo”.
La producción de carne aviar presentó una expansión en el acumulado enero-mayo de 2020. Los niveles productivos totalizaron 922 mil toneladas, con un crecimiento del 3,9% en comparación con las 887 mil toneladas de igual periodo del año anterior.
El consumo de carne aviar durante los primeros cinco meses de 2020 alcanzó las 825 mil toneladas, un 3,3% más respecto de las 799 mil toneladas de igual periodo del año 2019. De esta manera, continúa marcando récords históricos, teniendo en cuenta que en 2019 también había logrado esa marca.
La mejora del consumo de carne aviar es explicada por IES como consecuencia del deterioro en los ingresos de las familias que ya se observaba desde 2018. Ahora se sumó el impacto del coronavirus, que “significó un shock muy fuerte en la búsqueda de las familias de optimizar sus canastas y de almacenar provisiones por la cuarentena”. De esta manera, la carne aviar primó por sobre la vacuna y porcina, ante el efecto sustitución observado en las decisiones de consumo.
El consumo interno por habitante se ubicó en los 44,5 kg per cápita, siendo 2,1% superior al valor del mismo período de 2019, acercándose al récord de 45,8 kg per cápita del año 2015.
El tipo de cambio real alto impactó en los costos de los productores y los ubicó por encima del incremento de los precios del pollo tanto minoristas como mayoristas. De esta manera, al presentar una estrecha correlación con el tipo de cambio (el maíz es el principal insumo) los costos observaron un incremento cercano al 60%. El precio interno del maíz (principal componente de los costos de producción) registró un considerable incremento, al pasar de 5,8 $/kg en promedio en los cuatro meses de 2019 a 9,1 $/kg en 2020, lo que se tradujo en un fuerte aumento del 57% acumulado.
Bajo este escenario, se acrecentó significativamente la presión que ejerce la suba de los costos sobre los márgenes de rentabilidad de los productores, ya que la suba en los precios mayoristas del pollo fue menor al aumento del precio del maíz (41,7% vs 51,1% interanual en abril).
Comercio exterior
Por el lado de las exportaciones, IES Consultores reflejó que hubo un importante crecimiento en cantidades y una leve expansión en los valores en los primeros cinco meses del 2020. El sector se encamina a su segundo año consecutivo de expansión. El incremento en términos generales encuentra explicación por el incremento en los envíos en cantidades a China (fuerte suba debido al brote de la peste porcina africana), Chile, Sudáfrica y Singapur, mientras que los envíos a Brasil y Rusia presentaron una merma.
En diciembre de 2019, el gobierno decidió una suba en las retenciones a los envíos externos, entre ellos las carnes, que en el caso del pollo se ubicaron en el 9%, con un considerable incremento.
En este contexto de diversificación de las ventas, en el acumulado a mayo de 2020, las exportaciones alcanzaron un total de 98,4 mil toneladas, con una expansión del 8,3% frente a las 90,9 mil toneladas exportadas en los cinco meses 2019. En valores, el incremento fue leve, más precisamente del 0,9%, y alcanzó los u$s 143,7 millones contra u$s 142,4 millones de igual periodo de 2019.
De esta forma, en los cinco meses de 2020 la participación de las exportaciones en la producción alcanzó el 10,7%, contra el 10,2% registrado en igual periodo del año de 2019, con una suba del 4,2% en la participación de las exportaciones.
Por su parte, al igual que en los años previos, el volumen de importaciones fue ínfimo en los primeros cinco meses de 2020, equivalente al 0,3% del consumo en el acumulado a mayo de 2020, con 1982 toneladas compradas al exterior, lo que se tradujo en un derrumbe del 56,6%. En valores, el escenario presentó una contracción del 30,8% interanual, al efectuarse compras al exterior por u$s 8,7 millones.
Las ventas externas alcanzaron a 18 países en lo que va del año 2020, entre los que se destacaron China, Chile, Sudáfrica, Singapur, Arabia Saudita y Brasil, en ese orden, como principales destinos, que concentraron conjuntamente el 93,7% del valor total exportado.
En el acumulado a mayo de 2020, China se ubicó como principal comprador de los productos avícolas argentinos, con el 65% de las compras en valores; seguido por Chile (al desplazar a Sudáfrica), con el 10,4%; por Sudáfrica, con el 6,8%; Singapur, con el 4,4%; y Arabia Saudita, 4%. Se destacaron los incrementos en los envíos a China del 2,3% en valores, y a Singapur, del 105,8%, por su parte, las ventas a Chile se mantuvieron estables en valores, mientras que las ventas a Sudáfrica, Rusia y a Brasil presentaron mermas. En tanto, para el resto de los 8 países, los envíos al exterior medidos en valores registraron una importante caída del 55,1%. De esta manera, a lo largo del último año se observó un proceso de concentración de los envíos avícolas, principalmente a China, Chile y Sudáfrica.
En cuanto a las cantidades, en los primeros cinco meses de 2020, se mantuvieron los lugares ocupados en el ranking de valores, aunque con diferencias en las participaciones. De esta manera, China ocupó el primer lugar, con el 52,8% del total de las exportaciones en volúmenes, seguido por Sudáfrica, con el 18,3%; Chile, con el 9,7%; Singapur y Arabia Saudita, en la cuarta y quinta posición, con el 5,1% y 3,2% respectivamente. A estos países los siguió Rusia, con el 2,9%. Estos cinco países representaron el 91,9 % del total de las exportaciones en cantidades. Con respecto a las variaciones, se destacó el descenso en los envíos a Rusia y Brasil, con caídas del 58,4% y 14,1% respectivamente. En cuanto a los incrementos, se observó que Sudáfrica presentó una expansión del 26,6%, mientras que para el resto de los ocho países las exportaciones medidas en cantidades registraron una fuerte merma del 53,9%.
Para el año 2020 se espera que el sector avícola continúe creciendo a un buen ritmo. El principal impulso para la producción de carne aviar será el consumo interno, que ha crecido gracias al mayor rendimiento que tiene el pollo respecto a carnes sustitutas, como la vacuna y porcina, sumado a la relación ventajosa de precios en favor de la carne aviar.
Además, a partir del decreto de la cuarentena obligatoria, su consumo creció considerablemente po optimización de consumo y se espera que continúe haciéndolo en los meses subsiguientes.
Por otra parte, el informe estima que los envíos al exterior continuarán desempeñándose a buen ritmo, debido a la buena dinámica que presentaron las exportaciones a Chile, Sudáfrica y China, este último tomando vital relevancia, ya que representa más de la mitad de las ventas externas de nuestro país. De esta manera, se espera que el sector avícola continúe creciendo a buen ritmo, impulsado principalmente por el consumo interno y en menor medida, por las exportaciones. (fuente Agroclave, diario La Capital)