La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) redujo hoy la estimación de cosecha de trigo argentino 2024/25, pero el cifra proyectada sigue siendo “optimista” porque es superior a la prevista por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
“A pesar de las recientes tormentas, las lluvias importantes no llegan y el cultivo atraviesa el período crítico perdiendo potencial de rinde. La estimación de trigo argentino es de 19,5 millones de toneladas, un millón menos de lo que se esperaba a la siembra”, apuntó este miércoles la BCR.
Sin embargo, la última estimación realizada por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires es de una cosecha de trigo de 18,6 millones de toneladas, lo que implica que la proyección de la BCR sigue, a pesar de todo, siendo entusiasta. De todas maneras, la entidad rosarina aclara que se trata de un “escenario muy complejo y que aún puede empeorar”.
Las recientes tormentas del pasado 7 y 8 de octubre favorecieron al centro-norte de Córdoba y de Santa Fe, que recibieron entre 15 a 30 milímetros; incluso hubo algunos registros superiores, como en Bengolea, con unos 46 milímetros. “Pero para tener condiciones óptimas se necesitan 120 a 180 milímetros más”, señala el informe de la BCR.
Las lluvias también alcanzaron a Entre Ríos y Corrientes con valores de 30 a 50 milímetros. Para el resto de la región pampeana, los registros fueron nulos o muy escasos.
Ahora las “fichas” están puestas en una nueva inestabilidad entre el viernes 11 y el domingo 13. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) proyecta acumulados de 30 a 40 milímetros en buena parte de la zona núcleo pampeana.
La siembra de trigo argentina 2024/25 empezó con condiciones de humedad buenas a muy buenas tras las importantes lluvias del otoño. El área pasó así de 5,5 a 6,7 millones de hectáreas sembradas en el 2024. Pero desde mediados de mayo no hubo lluvias significativas para reponer la humedad perdida y las reservas de los suelos se fueron agotando.
La cosecha se mantiene en niveles buenos porque el clima ha privilegiado en esta campaña a regiones trigueras clave de la provincia de Buenos Aires, que comenzó con excelentes condiciones y luego fue recibiendo precipitaciones en momentos oportunos.
“El bastión triguero bonaerense, si bien quedó fuera de las recientes tormentas, se estima que alcanzaría rindes de un altísimo potencial. La provincia se perfila para superar un rinde promedio de 37 qq/ha. En Córdoba, el trigo pasa por un escenario muy complejo y con una necesidad urgente de seguir recibiendo agua. Se estima por ahora una media provincial de 27 qq/ha”, indica el informe de la BCR.
“El área santafesina también muestra una urgente necesidad de recibir agua en el corto plazo y se estima un rinde de 28,9 qq/ha. En el norte del país nuevamente la cosecha triguera será mala y no se descarta que termine tan mal como la del año pasado”, resumió.