La cooperativa láctea SanCor informó que cerrará su planta de Arenaza, ubicada a 35 kilómetros de la ciudad de Lincoln, y despedirá a los 22 empleados que trabajan allí en la línea de producción de Mendicrim.
El establecimiento estaba a cargo de ARSA (Alimentos Refrigerados, perteneciente a Vicentin), que lo compró luego de adquirir también las unidades de yogures, flanes y postres. El acuerdo incluía la continuidad de los operarios, que ahora quedaron a la espera de una respuesta en relación a su futuro.
Es que la producción del famoso queso crema – que nació en Arenaza- se trasladará ahora a la planta de SanCor de Brinkmann, en Córdoba, y pese a que se ofrecieron relocalizaciones y despidos voluntarios, el gremio lechero no llegó a un acuerdo con las empresas involucradas.
“Pedimos ante el Ministerio de Trabajo que se tomen las medidas necesarias en relación a SanCor, Alimentos Refrigerados y Vicentin, que son responsables de este fraude laboral en perjuicio de los compañeros que han sido discriminados en la transferencia de la planta de Arenaza”, expresó el abogado representante de Atilra, Ignacio Iúdica.
En esa audiencia, Atilra pidió “preservar las fuentes de trabajo” y el cumplimiento del pago de salarios. “Ellos reconocen que están debiendo y que a ese pago lo deben realizar”, dijo Iúdica.
Hasta el momento, se sabe que habrá una próxima audiencia ante Trabajo, donde el sindicato pedirá que se reubique a los empleados despedidos.