En los próximos 12 meses, la capacidad de faena de equilibrio podría caer hasta 300 mil cabezas.
Como es de conocimiento, en la última vacunación contra la aftosa se encontraron 450 mil terneros menos que el año anterior. Estimándose que esa fuerte baja se recortaría a la mitad cuando en la próxima campaña (la primera de 2015) se contabilicen todos los terneros nacidos tardíamente y que no fueron vacunados y registrados la primavera pasada.
Si bien se encontraron menos terneros se vacunó uno por ciento más de vaquillonas, 3,4 por ciento más de novillitos y el mismo número de novillos. En cuanto a las vacas, en la última campaña (segunda de 2014) se registró un aumento de 0,9 por ciento en Buenos Aires, 1,3 por ciento en Corrientes y 0,7 por ciento en Entre Ríos.
Se cree que la estimación de stock ganadero que hace todos los años a marzo el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), y que se publicará en las próximas semanas, dará un stock total algo mayor que el año pasado.
De esta manera quedará más que compensado el menor número de terneros destetados por un mayor stock en las existencias de vacas, vaquillonas y novillitos.
Para el ejercicio comprendido entre marzo 2015 y el mismo mes de 2016, la capacidad de faena de equilibrio del stock nacional caerá unas 200 mil a 300 mil cabezas, que de combinarse con una eventual fase de retención a partir de mediados del corriente año, podría traer como consecuencia una menor faena en 2015 y 2016.
EXPORTACIONES
En los primeros siete meses del “año Hilton” se han embarcado 13.150 toneladas, contra 13.933 del año anterior, lo que representa unas 779 toneladas menos que el ciclo pasado (una caída de 5,6 por ciento). Mientras que el precio FOB promedio de la Argentina de estos primeros meses del año retrocede más de un 20 por ciento, el de Uruguay cae sólo un cinco por ciento, al tener este país alternativas comerciales como Estados Unidos o Canadá para reemplazar el mercado ruso o europeo.
Argentina enfrenta caídas en los valores del rump & loin Hilton (R&L) del orden del 30 por ciento en más de seis meses, y ahora también sufre una baja del 15 por ciento en los valores de los 17 cortes vendidos a través de la cuota 481 (integrada por cortes de novillos terminado en feedlots )
Están también a la baja los valores a los cuales se vende a Chile, mercado hoy muy ofertado por Paraguay y Brasil, que sufren a su vez la pérdida de Rusia y la baja de los precios pagados por la Unión Europea.
La devaluación del euro y el derrumbe del mercado ruso afectan las exportaciones argentinas, que podrían pasar en los próximos meses de las 20 mil a las 15 mil toneladas promedio mensual.
Complica el panorama de nuestras exportaciones cárnicas el hecho de que mientras la mayoría de los países exportadores e importadores de carne vacuna han devaluado sus monedas, Argentina, con una tasa de devaluación mensual inferior a la inflación, no hace otra cosa que revaluar su moneda.
La fuerte devaluación de la moneda brasileña complica aún más las cosas, aunque hasta ahora la escasez de ganado en el país vecino impide que el valor del novillo se abarate en término de dólares.
PETRÓLEO
Muchos analistas piensan que la fuerte baja en el precio del petróleo traerá un aumento en el ingreso disponible de millones de consumidores, que podrían volcar parte de esas recursos al consumo de carne vacuna.
Pero hasta ahora, lo único que se ve es una caída dramática en las importaciones de carne vacuna de los varios países petroleros, como Rusia, Venezuela o Irán, que en conjunto adquirían hasta el año pasado un millón de toneladas.