Una de las claves de la expansión de la cadena de maíz en los próximos años será su relación con el ambiente y las crecientes exigencias que están estableciendo los mercados externos así como las demandas locales.
Ernesto Viglizzo, investigador del INTA, explicó que, en las políticas para mitigar el cambio climático hay una «pulseada entre los países que más emiten y los que menos emiten». Destacó que la Argentina debe insistir en que se mida correctamente el balance de carbono y no solo la huella de carbono de la cadena. Explicó que en el caso del maíz, mientras la huella marcaba 32 kg de emisiones de gases de efecto invernadero por tonelada productiva, al tomar la captura de carbono del sistema de producción, la huella real era de 12 kg. «Mediante un cálculo sencillo, el crédito de carbono de un campo podría ser transferido a otro», dijo Viglizzo.
Al respecto, el coordinador de la Fundación INAI, Nelson Illescas, se refirió al programa Carbono Neutro que siete bolsas de cereales y de comercio del país pusieron en marcha en noviembre de 2019, por el cual, en el mediano plazo, productores e industrias podrán medir y exhibir sus estándares ambientales. El proceso incluye el ingreso al mercado de bonos de carbono.
«Las exigencias ambientales no tienen que ser solo requisitos para el productor, tiene que haber incentivos para que cumplan y distribuirlos en toda la cadena», dijo Hernán Zunino, de la organización ambientalista The Nature Conservancy
El presidente del IICA, el argentino Manuel Otero, puso como ejemplo de adaptación a las normas ambientales, a la producción de café en Costa Rica, y de carne con producción silvopastoril en Brasil
«Si el futuro es biobasado, no puede ser de unos pocos, porque implica agregar valor y aprovechar biomasa en el territorio», sostuvo Mariana Stegagnini, presidenta de la Fundación Cedef. «Hay obstáculos: lo digital, la infraestructura, el género; hay territorios repletos de oportunidades, pero están aislados», añadió.
El investigador Pablo Nardone, explicó que en el contexto del cambio climático «ganan terreno estrategias que proponen cambiar un modelo de extraer por uno circular, con reutilización y nuevos productos, servicios y cadenas de valor».
«El cerdo fue una gran oportunidad para agregar valor al maíz y la soja, sobre todo en producciones lejanas a las zonas portuarias», destacó Leandro Culasso, presidente de la Asociación Argentina de Productores de Porcinos. (fuente diario La Nación)