Los cultivos de primera se encuentran en muy buen estado, en tanto, los de segunda se ven algo más afectados por las lluvias excesivas de diciembre y enero.
Las altas temperaturas registradas durante los últimos días en el centro norte santafesino sumadas a la alternancia entre días soleados y nubosos, lluvias aisladas y altos porcentajes de humedad permitieron que continúe el desarrollo de los cultivos pero afectaron la cosecha del maíz de primera.
Esta semana se llevaron adelante los controles sanitarios en los cultivos de soja de primera y de segunda, sorgo granífero, maíz de segunda y algodón con alguna dificultad a raíz de las lluvias ocurridas, según informó el Sistema de Estimaciones Agrícolas (SEA) para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, que difunden la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Ministerio de la Producción.
La soja de primera se desarrolla bajo buenas condiciones, atravesando el período crítico del cultivo, el llenado de grano. De acuerdo al SEA, la disponibilidad de agua útil en los perfiles de suelos es muy buena y el 75% de la superficie sembrada presenta un estado de bueno a muy bueno, con lotes excelentes; un 15%, estado bueno y desarrollo de planta medio y el 10% en estado bueno a regular con ciertos condicionamientos en su desarrollo por los excesos hídricos.Las malezas resistentes y difíciles siguen siendo un problema en los lotes y los productores continúan realizando aplicaciones de fitosanitarios para controlarlas.
Por su parte, los lotes de soja de segunda presentan mayor disparidad y heterogeneidad como consecuencia del impacto de los eventos climáticos de la última semana de diciembre de 2016 y en los primeros 15 días de enero de 2017, explicaron desde el SEA. “Los cultivos presentan indicadores en un mismo predio de dos estados fenológicos muy marcados, lotes con disparidad en el desarrollo y altura de plantas, diversos y variados grados de enmalezamiento y bajo porcentaje de uniformidad de lotes”, señalaron en el reporte semanal. También en los cultivos de segunda continuaron las aplicaciones de herbicidas e insecticidas para control de malezas e insectos que causan preocupación a los agricultores de la región.
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