Durante la última semana se registraron importantes precipitaciones en gran parte del área agrícola nacional, que permitieron recomponer humedad y mejorar la condición hídrica del perfil.
Sin embargo, sobre regiones del centro y sur del país, las tormentas fueron acompañadas por caída de granizo y posteriores heladas que provocaron daños puntuales sobre lotes de trigo espigados y lotes de maíz que transitan etapas de diferenciación foliar.
A su vez, las lluvias acumuladas ocasionaron excesos hídricos en ambientes bajos sobre algunas localidades del centro y oeste de Buenos Aires y de la Cuenca del Salado. De todas maneras, a pesar de los diversos eventos climáticos, gran parte del trigo y del maíz implantado mantienen una adecuada condición de cultivo.
Por otra parte, las labores de siembra de maíz 2018/19 continúan avanzando a nivel nacional, con un progreso que alcanzó el 19,5 % de las 5.800.000 hectáreas proyectadas para la campaña en curso. La mayor actividad se relevó sobre las provincias de Córdoba y Buenos Aires con implantaciones de lotes tempranos.
Desde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires el clima fue marcando los acontecimientos más relevantes del cultivo de maíz con destino grano comercial. Por un lado, durante la última semana, la siembra progresó a muy buen ritmo debido a las adecuadas reservas de humedad que se acumularon en el mes de septiembre.
Gran parte de los avances se concentraron en el centro y sur del área agrícola nacional, particularmente en las provincias de Buenos Aires y Córdoba.
En paralelo, se relevaron las primeras incorporaciones de girasol en el centro y oeste de la provincia de Buenos Aires, donde la óptima condición de humedad permitió comenzar de manera anticipada con la siembra de la oleaginosa. En el NEA y Centro-Norte de Santa Fe, el girasol mantiene una buena condición de cultivo con baja presión sanitaria.