En el marco de la JAT Agrícola organizada por la Región Chaco Santiagueño de CREA, el 20 de octubre en el hotel Catange de Charata, y con la presencia de más de 200 productores, se llevó a cabo el Primer Taller del Proyecto “Herramientas para la sostenibilidad del cultivo de soja en el Gran Chaco Argentino”, de CREA y ACSOJA, que cuenta con el financiamiento del Land Innovation Fund.
Por la mañana, la agenda de la JAT Agrícola contó con ponencias de asesores que presentaron análisis de campaña y ensayos de la región CREA Chaco Santiagueño sobre soja y maíz. Por la tarde, se presentó el proyecto impulsado de forma conjunta por CREA y ACSOJA, con el financiamiento del Land Innovation Fund (LIF) sobre herramientas para la sostenibilidad del cultivo de soja en el Gran Chaco Argentino. El cierre de la presentación fue con un taller de trabajo para los productores asistentes.
“Fue una jornada espectacular donde pudimos desarrollar lo planificado junto a los más de 200 asistentes que trabajaron en grupos, tratando de definir entre ellos líneas de trabajo que tengan que ver con sostenibilidad hacia adelante en esta zona de Chaco, Santiago y Formosa”, señaló Laura Carabaca, quien lidera el proyecto por parte de CREA, además de ser asesora y coordinadora de la Mesa Agrícola de la región NOA.
“Estamos muy contentos con lo que hemos logrado generar en este espacio, identificando la necesidad de concretar capacitaciones relacionadas a la mejora de las prácticas agrícolas. Surgieron dos líneas claves como la gestión de los envases de fitosanitarios y el manejo del suelo. Ahora viene la etapa de priorización, definición y planificación para el año próximo”, agregó.
Carabaca aseguró que “el proyecto busca crear con cada una de las regiones que lo integran, una guía que marque el camino hacia la sostenibilidad”.
Otro de los disertantes fue Guillermo García, líder del área de Ambiente de la Unidad de Investigación y Desarrollo de CREA, quien brindó un contexto general sobre producción sostenible y algunos aspectos que debería considerar el productor a la hora de trabajar en pos de lograrla.
“En CREA tratamos de hacer mejor las cosas. En este sentido, es importante tener en cuenta que la sostenibilidad es un concepto dinámico, aspiracional y multicriterio, donde hay muchas y diferentes expectativas que lógicamente pueden generar tensiones. Es necesario buscar consensos y la ciencia puede ayudarnos a ello. La mejora continua y el trabajo en red son en definitiva dos grandes pilares para la sostenibilidad”, señaló.
Por su parte, la ingeniera Fernanda Feiguin, técnica del Área de Ambiente de la Unidad de Investigación y Desarrollo de CREA, habló sobre el proceso de Gestión Ambiental de la entidad, cuyo objetivo es que los miembros puedan evaluar la dimensión ambiental de la sostenibilidad.
El proyecto se basa en tres herramientas y el marco de la JAT sirvió para reflejar algunos datos y resultados de miembros CREA que están comenzando a trabajar con ellas. “El objetivo es que más productores se sumen al proyecto y medir esas acciones”, explicó la ingeniera. “Siempre es bueno estar en las regiones y poder escuchar e identificar demandas y necesidades del lugar. Para nosotros es muy enriquecedor, ya que no solo les damos información, sino que aprendemos de ellos, y es esa interacción la que alimenta el proyecto para mejorarlo día a día y poder cumplir su función”.
Leonardo Fogar, Coasesor del CREA Sanavirones en la zona de Bandera y asesor de campos en la zona de La Clotilde, Chaco, analizó el taller del proyecto LIF como positivo y remarcó que “hoy el campo tiene la mirada bastante puntual de la comunidad con respecto a todos estos temas y a las leyes que marcan un camino. Si bien algunas acciones todavía no se están haciendo, van a llegar en el mediano plazo y entenderlas ahora, nos dará una oportunidad mayor ante la adaptación que requieren estos cambios”.
En este sentido expresó que no duda que los productores CREA van a ser los primeros en dar el puntapié inicial a esos cambios. “Creo que tenemos un gran trabajo por delante y esta información se trabajará en la mesa agrícola durante el próximo mes con muchas expectativas”, agregó.
Agricultura por ambiente, disminuir el uso de fitosanitarios, aumentar la sostenibilidad del sistema, fueron algunos de los aportes en relación a líneas de trabajo que se volcaron en los grupos durante el primer taller para productores del proyecto “Herramientas para la sostenibilidad del cultivo de soja en el Gran Chaco Argentino”, de CREA y ACSOJA.
La meta del LIF es apoyar financieramente “las soluciones innovadoras” mediante alianzas estratégicas con organizaciones regionales de productores. En el caso de los proyectos de producción sostenible en El Cerrado, Amazonia y el Gran Chaco alcanzan a 1,6 millones de hectáreas.
Los planes para expandir las operaciones del Land Innovation Fund en América del Sur cuentan con una premisa que va más allá de ampliar el número de proyectos; es potenciar la eficacia de las iniciativas y la diversidad de las propuestas, con el objetivo de construir un portafolio de proyectos y socios para implementar conjuntamente soluciones de innovación a favor de la transformación agrícola, siempre con el enfoque en el establecimiento y el productor rural.