La Delegación del Renatre Santa Fe sur realizó un exhaustivo trabajo de fiscalización durante el último año atravesado por la pandemia, donde se relevaron un total de 395 trabajadores en sectores como agricultura, semilleros, contratistas rurales, ganadería bovina, porcina y tambos, avícolas, acopios, acondicionadoras de semillas y granos, frutihortícolas, aplicadores de fitosanitarios, parqueros y jardinería, entre otros.
Desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020, la delegación Santa Fe Sur instruyó una agenda en el territorio del sur santafesino que promovió recorridas por instalaciones de diferentes establecimientos rurales para poder constatar que los trabajadores estén debidamente registrados y las condiciones de trabajo sean las adecuadas.
Con el firme compromiso regularizar la situación laboral del trabajador rural, y además librar la lucha contra la trata de personas con fines de explotación laboral, se realizaron en el último año 78 inspecciones, en la cuales fueron detectados indicios de trata de personas con fines de explotación laboral.
“Hemos trabajado en conjunto con todas las delegaciones de Uatre del sur de Santa Fe, con el ministerio de trabajo de la provincia de Santa Fe, y de Nación, fuerzas federales, Higiene y Seguridad, Afip y con el Comité Ejecutivo de Lucha en Contra de la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a las víctimas”, mencionó el delegado provincial del Renatre, Andrés Alasia.
Ese trabajo coordinado permitió que se llevaran a cabo denuncias al *145 por detección de Indicios de Explotación Laboral Rural, y ante COPRETI por detección de Trabajo Infantil, y denuncias a PROTEX por IELR y TI.
Como consecuencia de ello, desde la delegación se arbitró la gestión de prestación extraordinaria por las mencionadas denuncias para trabajadores víctimas de presunta trata de personas con fines de explotación laboral.
“En un año complejo para el país, no dejamos nunca de estar junto al trabajador rural, intensificando las fiscalizaciones, como así también las capacitaciones. El objetivo de las fiscalizaciones es comprobar que los trabajadores estén debidamente inscriptos al organismo, fortalecer las acciones que promueven el trabajo decente en la actividad rural, y dar una dura pelea para la erradicación del trabajo infantil y la trata de personas con fines de explotación laboral”, afirmó el delegado.
“La única manera de tomar contacto con los trabajadores más vulnerabilizados es estando en el territorio, y aún frente a las complejidades que demandó la pandemia, no dejamos de estar junto a los que más lo necesitan” destacó Alasia.