El pasado lunes, 6 de marzo, arrancó la campaña de vacunación contra la fiebre aftosa, con la característica principal de ser una vacunación total, o sea que abarca todas las categorías. El médico veterinario Luis Berasi, integrante de Comisión Directiva de Sociedad Rural Venado Tuerto y de la Comisión Administradora de la Fundación de Lucha Sanitaria de Venado Tuerto, dio algunos detalles en una entrevista realizada en el programa de TV “Tranquera Abierta”.
“La única recomendación por la época del año es recordar que la mayoría de las terneras están en edad de vacunación contra brucelosis” advirtió el profesional, agregando en cuanto a vacunación contra carbunclo que “en Santa Fe es obligatoria para todos los bovinos mayores de 8 meses, pero no tiene una fecha fija de vacunación, es una sola dosis al año y se puede hacer cuando uno lo disponga”.
Además se refirió al tema costos, que no es ajeno a la inflación que sufre el país. “En la fundación de Venado Tuerto el costo de la vacunación será de $31,50, a fin de año el laboratorio aumentó un 15% los precios de las vacunas y nosotros tratamos de afinar los números lo máximo posible y logramos aumentarla solamente el 10% para esta campaña” dijo Berasi.
Operaciones de carne
Por otra parte, vale recordar que el 1° de marzo fue el vencimiento de la inscripción para el registro de operadores de carne, donde se dieron algunos cambios. “Ahora, en las ventas de hacienda, el IVA se reintegra a través de una cuenta bancaria, y al que no está inscripto se le retiene, por lo que deben informar un CBU de una cuenta bancaria que será donde se depositará” explicó el médico veterinario.
Otro de los cambios importantes es en torno a la trazabilidad de los terneros y su alcance. “Al comprar, el invernador no le tiene que pedir a quien le prevé los terneros el TRI (Tarjeta de Registro Individual), la compra se hace solamente con el DTE (guía) como cualquier otra transferencia de hacienda” comentó el especialista.
Y tras cartón agregó que “cuando esos animales llegan al establecimiento inscriptos para exportación, ahí el productor debe tomar los números de caravana e informarlo al SENASA para que pasen a formar parte de su stock con destino a exportación”.
Como conclusión a ello, podemos decir que son dos los cambios importantes: uno es que todos los establecimientos son proveedores de terneros trazados y la otra es que el productor que compra esos terneros tendrá el trabajo de tomar los números de caravana y registrarlos en el SENASA.
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